Por aquí de nuevo
Parece que hace una eternidad cuando me pasé a escribir el blog por última vez. Desde entonces ha cambiado todo muchísimo: los peques han crecido un montón, murió mi madre, yo comencé a ejercer como asistente virtual, he estado trabajando en una academia y he cambiado de especialidad para las opos del año que viene. Además, me detectaron una dolencia cardiaca de la que os hablaré otro día.
El año pasado, entre hospitales y rehabilitación del ictus de mi madre, vivía con visión de túnel, día a día. Y yo, que siempre he sido de hacer planes cara al futuro, me he dado cuenta de que día a día es la mejor manera de vivir, primero porque no sabemos cuando nos va a tocar abandonar el barco y segundo porque al centrarte en lo que estás haciendo disfrutas mucho más del momento.
Llevaba mucho tiempo con el blog cerrado y con muchas ganas de abrirlo, pero no veía el momento porque no quiero que se convierta en una obligación. Pero Mer me ha recordado el placer de escribir y he vuelto a tener presentes los motivos por los que abrí el blog.
Quiero que este blog se convierta en mi memoria, en la memoria de mis peques, en ese álbum de recuerdos que te reconforta cuando te faltan tus seres queridos y en ese libro de recetas que te devuelve por un segundo a tu infancia con esos olores y sabores tan tradicionales.
Porque la vida dura lo que dura y hay que aprovechar cada instante.
¡Gracias por leerme!